Recuerdos de infancia

Cuando llegan estas fechas no puedo dejar de recordar mi infancia, cuando era pequeña y la vuelta al cole era tan inminente. Recuerdo como si fuera ayer esos nervios previos, esos nervios que hacían que hasta el hambre desapareciera, las ganas de volver a ver a tus amigos desde el verano hacia que tuviera más ganas todavía. El hecho de estrenar mochila, libros, cuadernos y un montón de material que mi madre me compraba me hacía sentir entusiasmada, no eran muchos los niños que tenían tantas ganas como yo, no es que me gustara estudiar mucho iba sacando el curso como buenamente podía, pero el olor de los libros nuevos me encantaba. Recuerdo que cuando mi madre los compraba llegaba el momento de forrarlos, evitábamos con ello que se estropearan le ayudaba y me encantaba ojearlos mientras el aire dejaba salir ese perfume a nuevo tan rico. Lo mismo me pasaba con los cuadernos, y con las ceras esas de plastidecor que tanta gama de colores tenía, sin duda eran las que más me gustaban.

Ahora siendo ya mayor y teniendo hijos en edad escolar la vuelta al cole sigue entusiasmándome igual o más, ya que no soy esa niña embelesada viendo como su madre prepara todo lo necesario, sino que soy yo quien se lo prepara a mis retoños. En principio cuando empezaron en curso íbamos todos juntos a la papelería de nuestro barrio a por todo lo necesario, disfrutábamos ese momento un montón porque ellos entusiasmados pedían a la señora dependienta sus propias cosas y la verdad que a mí se me caía la baba. El problema vino cuando los precios empezaron a subir, tener que suministrar material escolar a dos niños es muy caro y sin los precios son elevados mucho más. A sí que no tuve más remedio que buscar otro tipo de opciones, sintiéndolo mucho por la señora debía buscar en el que las mismas cosas me salieran más baratas, y fíjate que tuve suerte, después de buscar a través de internet encontré http://www.selfpaper.com/ una papelería online con unos precios muy asequibles, no es que me guste mucho comprar por este medio pero me di cuenta que con lo que me ahorro lo puedo sumar a lo que tengo destinado para ropa, antes ni siquiera tenía esa opción ya que si me descuidaba me quedaba corta, por lo que no puedo estar más satisfecha.