Cuando hay agua de mas en el motor del coche

El agua no es del todo bienvenida en el interior del coche, cuando se mezcla con el refrigerante puede ser un quebradero de cabeza. Una forma sencilla de detectar si se han mezclado, es observar con atención la tapa del vaso de expansión, si se nota una materia pegajosa amarillenta, quiere decir que sí ha entrado el agua. Si después al medir el aceite, marca que el nivel no está al nivel establecido, debe revisarse las condiciones en las que se encuentra.

¿Por qué razón entra agua en el aceite del motor?

Dentro de la máquina se encuentran diferentes tubos, de los cuales algunos contienen aceite y lo hacer circular para lubricar diferentes partes; mientras que otros son los que llevan el refrigerante para enfriar el motor. Es muy común que estos tubos tengan un punto de comunicación, suele ser en la culata o en su junta, de ser este el caso resulta ser una avería cara ya que la culata tendría que ser bajada y revisada para detectar l que genera el problema.

También podrían haberse mezclado al estar en el enfriador del aceite, que es un componente que como lo indica su nombre es el que se encarga de hacer que el lubricante se enfríe y este haga lo mismo con el motor. Generalmente sus síntomas son muy evidentes, por lo que no debería pasar inadvertido.

Las consecuencias del ingreso del agua al motor

Si la cantidad de agua que ingresa al motor no se puede evaporar por él mismo, las consecuencias pueden ser serías dependiendo la magnitud del problema. Debe tener presente que si el motor se llegase a llenar de agua, es casi seguro que llegará a los cilindros y así el pistón no podría subir y hacer su recorrido.

El doblez o fractura de bielas es una de las averías más fuertes, esta lleva a que se dañen los cilindros o el cigüeñal. Debido a que las bielas son la conexión con los pistones y si ellos se averían podrían llegar a averiar el bloque motor. Con frecuencia se reemplaza el bloque, ya que está elaborado en fundición de acero.

Si se fracturan las cabezas de pistón, se delatan por el golpeteo que emiten, también se puede percibir la pérdida de la potencia y aumento del consumo tanto del combustible como del lubricante. La fractura no solo indica un quiebre grande, pueden presentarse pequeñas erosiones o peroraciones por todo el borde de la cabeza del pistón.

Comprando en un desguace podría ahorrar un poco el presupuesto y aparte tienen garantía. Los motores segunda mano son una excelente opción ante averías que serían muy caras reponer alguna pieza.