Hacerle un swap al coche
Con frecuencia quienes se apasionan por los coches les gusta modificarlos o mantenerlos lo más original posible; en la planeación de esos cambios se encuentra el reemplazo del motor. Desde hace algún tiempo se hicieron muy populares estos cambios, se les conoce como Swap y consiste en la sustitución de las piezas mecánicas del vehículo por otros que sean superiores y así obtener mejores prestaciones.
¿Qué se debe considerar para hacer un swap al coche?
Las razones para hacerle un Swap al vehículo pueden ser muchas y muy variadas, pero una de las más usuales es por algún fallo del motor en un coche viejo. Ello debido a que con frecuencia no se consiguen las piezas que se requieren para su reparación, entonces se aprovecha la oportunidad de ajustarle uno más moderno, así se logra reducir su consumo y adquirir más potencia.
No suelen haber límites al hablar de la potencia, pero sí se deben tener en cuenta diferentes aspectos para llevar a cabo las reformas. Uno de los factores que se debe cuidar es hacer el cálculo del porcentaje del aumento de la potencia; si llegase a rebasar el 30%, se tiene que mejorar el sistema de frenos y también reemplazar la caja de cambios.
También es importante recordar el peso, el cual debe ser el mismo o lo más similar a lo que el coche tenía como tolerancia, ya que no es recomendable darle sobrepeso. Muchos montan un nuevo motor con mayor cilindrada y con él cambios como el de la caja, los frenos, etc., que con frecuencia pesa más que sus originales. Para evitar este tipo de problemas es primordial que se comparen las fichas de ambos coches (el que se repara y el donante) para corroborar que no haya inconvenientes.
No debe pasarse por alto la homologación al hacer el swap, así se evitan contratiempos con la ITV (Inspección Técnica de Vehículos) y otros servicios como las aseguradoras, entre otras. Si el cambio es por componentes en igualdad de especificaciones, no se requiere homologar, mientras que si hay alguna diferencia sí debe hacerse y dejarse constancia en la ficha.
Para hacer estas modificaciones no tiene que buscar un coche con la máquina que desea, puede utilizar motores usados audi, Mercedes Benz, Seat, etc., siempre y cuando se ajuste bien al modelo y marca de su vehículo. Una forma sencilla de buscar es por medio de una central de desguaces especializada en motores, así acorta tiempo y aumenta las posibilidades de ubicarlo.